El nacimiento de un niño… y una «mamá poderosa»

Kristen Orrison, en labor de parto de su segunda hija, estaba a punto de rendirse. Agotada física y emocionalmente, temía que fuera hora de pujar. Kristen parecía haber llegado a su límite.

Su partera, Kirstin Carhart del Centro de Salud Comunitario de Umpqua, después de haber guiado a Kristen durante su primer embarazo y parto, tomó la mano de la joven madre.

"Oye, oye, oye", la engatusó Kirstin al recordar el primer parto de Kristen. "[Empujar] es lo que te encanta, ¿recuerdas?"

Para Kristen, no se pudieron haber dicho palabras más reconfortantes. Así que lo hizo: empujó. Poco después, ella y su esposo Kolby dieron la bienvenida a Lucy al mundo, convirtiendo oficialmente a su hija mayor, Scarlet, en una orgullosa hermana mayor.

"Me gusta bromear diciendo que me quedé embarazada la segunda vez porque la extrañaba", recuerda Kristen sobre su partera. "Es más como de la familia que cualquier otra cosa y siempre me ha hecho sentir muy querida".

Para Kirstin, tener un bebé es sólo una parte de la experiencia para mujeres como Kristen.

“Cuando ves a las niñas pasar por el parto, no se trata solo de tener un hijo”, dice. “Se trata de que estas niñas se den cuenta de que tienen un poder que desconocían; es asombroso porque no se trata solo del nacimiento de un hijo, sino también del nacimiento de una madre poderosa”.

Kirstin estuvo presente durante todo el proceso para ambos hijos de Kristen.

"Sé que algunos médicos aparecen justo cuando llega el momento de pujar", dice Kristen. "Kirstin estuvo presente durante mi trabajo de parto, guiándome en cada contracción y hablándome de mis miedos y dudas".

La experiencia –cada experiencia de parto y nacimiento– es especial para Kirstin como partera.

“Puedo presenciar a chicas como Kristen encontrar su determinación interior y luchar contra la adversidad extrema para superar el proceso de parto”, dice. “Kristen salió de esto como una persona más fuerte y poderosa, y me siento honrada de haberlo presenciado”.

Según Kristen, fue su partera quien la ayudó a encontrar ese poder interior.

“Me ayudó a encontrar la confianza en mí misma que necesitaba para tener un parto natural”, dice Kristen. “Siempre estaré agradecida por su constante apoyo y aliento, y por haber dado a luz a mis dos hijas sanas”.